Stray Kids conquistó España con su esperado concierto de una forma que nadie imaginaba porque su llegada a Madrid se convirtió en un acontecimiento histórico para el K-pop y para todos los STAYs españoles. Desde el primer momento el grupo mostró una conexión increíble con el público español que había estado esperando años para verlos en vivo y cuando por fin pisaron el escenario del Metropolitano la energía explotó. Miles de fans llenaban el estadio cantando cada letra, levantando pancartas y moviendo sus lightsticks como si todos hubieran ensayado juntos. Los propios miembros se sorprendieron al escuchar a tanta gente coreando sus canciones y Bang Chan llegó a decir que lo más bonito del concierto era que el público cantara con ellos, algo que mostró que la emoción era mutua.


El espectáculo fue potente desde el inicio con luces, efectos y una puesta en escena enorme que hacía sentir que aquello no era solo un concierto sino un evento cultural. SKZ interpretó sus éxitos más emblemáticos como God’s Menu, Back Door o Thunderous y el estadio vibraba con cada intro. La prensa española destacó cómo el concierto marcó un antes y un después en la presencia del K-pop en el país porque nunca antes un grupo de este género había logrado llenar un estadio tan grande de esta manera. Más allá de la música se notaba la emoción de los fans que veían en Stray Kids algo más profundo: un mensaje de fuerza, consuelo y pertenencia. Muchas personas viajaron desde diferentes partes de España e incluso desde otros países solo para vivir ese momento lo que dejó claro el impacto global del grupo.
La noche terminó con una sensación de euforia compartida tanto por el grupo como por el público. Stray Kids no solo ofreció un concierto sino que dejó una marca en la memoria colectiva de miles de fans españoles y demostró que su presencia en España no era una simple parada de gira sino una conquista emocional que quedará grabada como uno de los momentos más grandes del K-pop en el país.
